Por cosas propias del destino, en este cruces de caminos en esta existencia casual,
En un mundo de coincidencias e informal,
En un segundo de esa inmensidad te atravesaste en mi camino.
Recuerdo que en ese cruzar me regalaste una sonrisa,
Me dejaste una hermosa mirada atrevida,
Una charla genial y entretenida, que me llevo al instante a que mi vida perdiera la prisa.
Disfruto ahora con pasión esos únicos momentos, acariciando a cada segundo esos instantes y ese espacio,
Dejando una huella, dejando en mi razón que lo mas importante, es que la vida sea un pasar con ritmo lento.
Ahora siento que todo ha cambiado, ahora hay un tiempo para todo, como debe suceder cuando esta el amor ahí puro y latente
Que atándome a tu corazón y a tu cariño, me fui fundiendo a tu modo de ser.
Solo se, que hoy puedo decir bajo la suave brisa de altamar,
Desde este sentir de verano que quema y sofoca mi corazón, nada mas puedo decir mas que te amo como siempre doncella mía, como desde ese primer día, que lo siento como si fuera ayer...