A veces... queremos decir tantas cosas pero no las decimos.
A veces... se nos va el tiempo en discusiones sin sentido.
A veces... en vez de decir cuanto amamos, nos pasamos la vida diciendo solo tonterías.
A veces... se pierde a la persona que más se ama, por no tratar de entenderla y maltratarla.
A veces... es bueno decir te amo y ser tierno, en vez de decir otras cosas y llegar a la ridiculez y a la ironía.
A veces... las mañanas no son como uno quisiera que fueran.
A veces... el sol no brilla como deseamos y nuestros días son grises.
A veces... la luna no la vemos y nuestras noches son oscuras.
A veces... hay que tener paciencia con la persona que se ama de verdad.
A veces... nos nubla la ira y ofendemos sin querer a quien más amamos.
Es bueno pedir perdón, si sabes que has ofendido.
A veces... es bueno decir una plegaria a Dios, dando gracias.
A veces... es bueno decirle a un amigo cuanto lo extrañamos.
A veces... es bueno ver nuestros defectos antes de juzgar a los demás.
A veces... es bueno pensar en uno y borrar de nuestra mente las ofensas diarias para vivir cada minuto en paz.
Pero ante todo siempre piensa en ti y empieza con Dios y contigo, todas las mañanas de todos los días de tu vida y luego ve al mundo a mostrar tus valores y a compartirlos porque nosotros también necesitamos de ti.